Nunatak: «Con un grupo de rock hay que ser valiente, porque hay muchas razones para venirse abajo»

Sin categoría

Nunatak se metieron entre pecho y espalda una buena ración de festivales desde la publicación en marzo de su tercer disco de estudio, Nunatak y El tiempo de los valientes (Warner Music, 2018), pero ahora afrontan lo que queda de año con toda la intensidad de una gira propia por salas que acaba de pasar por Madrid.

«Ver a un grupo en un festival o en una sala es muy diferente», destaca a Mercadeo Pop Adrián Gutiérrez, vocalista y guitarrista de la banda murciana, mientras su compañero el batería Álex Dumdaca, admite que con este álbum están haciendo el recorrido «a la inversa, primero los festivales y luego las salas».

Y sobre este otoño con su propia gira, añade Dumdaca: «Teníamos la ilusión de que cuando lleguemos a las salas la gente se supiera el disco entero. Queríamos sudor y codazos, vivir este disco con el público de cerca. Hay más conexión porque estamos todos a lo mismo y además puedes ofrecer un espectáculo más completo a gente que ha pagado por verte a ti. Esa noche es tuya».

De la misma opinión es el teclista Pedro Hernández, quien se muestra entusiasmado por «estar cerca del público», tocando ante «gente que te conoce y quiere disfrutar con la banda». «Los festivales son una pasarela, un trampolín para dejarte ver, pero la conexión artista-público y la transmisión del mensaje es más directa en las salas», sentencia.

La gira en cuestión ha pasado ya por Sevilla, Almería, Granada y Madrid (Sala El Sol), y tiene aún por delante fechas ya mismo en Valencia (23 de noviembre, Loco Club) y Barcelona (24 de noviembre, La Nau). Además, por aquello de no olvidar los festivales, estarán en el Intro Music de Valladolid el 1 de diciembre. Sus primeras citas en 2019 serán en su Murcia natal (1 de febrero, Garaje Beat Club) y en el Cooltural Fest de Almería el 16 de agosto.

«UN PUNTO IMPORTANTE»

Como buen tercer disco, Nunatak y El tiempo de los valientes marca un momento destacado en la trayectoria del grupo, tal y como admite Adrián, quien afirma que sienten que han llegado a «un punto importante, una parada en el camino a nivel estilístico y de sonido».

«El primero es el debut, el segundo es el difícil y el tercero el de la consagración para la bueno o para lo malo. Pero es pronto para decir si es definitivo, tanto para lo bueno como para lo malo. Hemos hecho el disco que queríamos, estamos contentos con el resultado y la acogida está siendo muy buena», explica el vocalista.

Dumdaca, por su parte, señala que han ido «dando pasos con cada disco», partiendo un «folk más orgánico», pasando por «algo de electrónica» para llegar hasta el momento actual con más guitarras eléctricas. Por eso remacha: «Hemos conseguido la cohesión de todo ese sonido nuevo ampliado llevado a un punto que nos gustaba mucho y que nos define».

Y tercia Adrián para remarcar que los coros ganan espacio: «Queríamos trabajar los coros a nivel de composición y producción para que tuvieran un peso brutal en las canciones. Todo esto viene de un concierto de PJ Harvey donde nos enamoramos de este tipo de coros grupales, que suben el nivel y cambian totalmente el sonido de la banda».


«EL HUERTO DE SONIDO»

Destacan todos en este punto la aportación del productor Raúl de Lara, quien «ha llevado a otro nivel el sonido del grupo», que quería transmitir en disco «la energía» que saben que transmiten en directo. «No tanto a base de distorsiones o partes cañeras, sino de gordura, de molla, de capas, de distintos planos de profundidad», indica Dumdaca, antes de que Adrián sentencie entre risas: «Es el muro de sonido murciano… el huerto de sonido».

Ese sonido robusto envuelve a unas canciones que reflexionan sobre el concepto de valentía, relacionado con «el hecho de aceptar las mierdas del día a día, los miedos y las frustraciones, y seguir adelante». «Una valentía un poco de perfil bajo, no de superhéroe, ni de meterte en un fuego a salvar a un niño. Va más de ajustarte a un presupuesto de mierda y marcharte de casa, de ser fiel a ti mismo», explica el cantante.

«Es que el hedonismo siempre ha tenido mucha importancia en el pop», apostilla el batería, antes de que vuelva a tomar Adrián la palabra: «Es súper válido cantar de salir a mover el cucu, pero creo que hace falta que la música más alternativa o con un componente más rock diga más cosas. Hace falta que hable un poco de las cosas que importan de verdad».

Estas reflexiones llevan a Dumdaca a subrayar que «más de la mitad» de todo lo que escuchan en el sendo de la banda es de «hace décadas», con Adrián aún yendo más allá en sus afirmaciones: «No descubrimos nada si decimos que los sesenta y los setenta son las mejores décadas de la música». Y aún vuelve Dumdaca a tomar la palabra entre risas: «Ahora la gente hace lo que puede pero la crema pastelera estaba ahí».

Vuelven ambos sobre el concepto de valentía del álbum para terminar relacionándolo con la propia vida de Nunatak, que atraviesa ahora un momento dulce. «Con un grupo de rock hay que ser valiente, hay que echarle huevos y no venirte abajo, porque hay muchas razones para venirse abajo», confiesa Dumdaca, con Adrián asintiendo: «Hay muchos días malos, muchas expectativas no cumplidas. Pero por suerte nosotros ahora estamos yendo a más y esta es nuestra vida».

ENTREVISTA PUBLICADA ORIGINALMENTE POR David Gallardo EN EUROPA PRESS

Comparte

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *