Jornada inaugural del Mad Cool 2024 con un (figurado) duelo generacional con The Smashing Pumpkins y Garbage tratando de atraparnos en el rock alternativo de los años noventa (en los que habitamos de por sí) y Dua Lipa montando una pista de baile para 56.000 personas para escapar de sus guitarreras garras. Hubo otros muchos conciertos, hasta una veintena en plan ‘Elige tu propia aventura’, pero la nuestra es esta.
Los iconos de los noventa y el pop del siglo XXI. Dos universos contrapuestos en el tiempo y en el espacio que confluyen en este arranque festivalero sin ninguna reseñable incidencia. Todo como la seda. Y esto en sí mismo ya es una noticia buena e importante, pues la última vez que estuvimos en el recinto Iberdrola Music en el cierre del Mad Cool 2023 aquello casi se va de madre con 70.000 personas forcejeando con los límites lógicos del aforo del recinto. Los que estuvimos el pasado año sabemos que la mejora es sustancial y, de hecho, vital.
Un buen comienzo sin incidencias
Precisamente por esto último la organización ha limitado el aforo a 58.000 asistentes, por lo que podemos hablar técnicamente de lleno en el primer día, a pesar de lo cual todo estuvo en su sitio sin colas para entrar y con movilidad fluida entre unos escenarios con un sonido ciertamente portentoso. Muy favorable que esta edición se hayan repartido los (muchos) aseos por todos los laterales del recinto para evitar aglomeraciones pasadas en el centro. Casi puede decirse que hasta sobran barras, aunque otra cosa son los precios (eso ya peor, aunque hay que remarcar que se puede entrar con bebida y comida de fuera).
Mucho calor, eso sí, pero eso ya tiene que ver con estar en Madrid en el mes de julio. El césped artificial ejerce su función como buenamente puede superados los 30 grados, y desde luego marca la diferencia con esos otros festivales que plantan a miles de personas directamente sobre un asfalto en llamas o solares arenosos. Es dura la vida del festivalero, qué duda cabe, en el caso del Mad Cool principalmente porque la gran mayoría de los asistentes tiene pinta de estar sobrellevando como buenamente puede la crisis de la mediana edad. Berrear y saltar en un festival es su manera de pedir ayuda.
Garbage
Por un lado los años noventa, decíamos. Garbage bajo un sol de justicia a pesar de ser ya las ocho de la tarde. Shirley Manson se va poniendo cada vez más roja, se da frescor en la cara y el cuello con lo que parece una bolsa helada, bebe agua y se refugia a la sombra en el fondo del escenario cada vez más según avanza la actuación. Termina reconociendo entre risas que ella es de un lugar donde ni de coña hace este puñetero calor (Escocia no es Villaverde, definitivamente) y acaba tirada por los suelos en una mezcla de performance y supervivencia.
Pero mereció el pena el viaje desde canciones más recientes como ‘The men who rule the world’ y ‘No Gods no masters’ a ‘Stupid girl’, ‘I think I’m paranoid’ o ‘Special’. Ahí está a las baquetas Butch Vig, historia viva de la música de nuestro tiempo como productor del ‘Nevermind’ de Nirvana o de los primreos discos de, precisamente, The Smashing Pumpkins. Los años locos, podría decirse, que se mantienen vivos dentro de buena parte de nosotros. Y se nota, porque con el triunvirato final el gentío se viene arriba, vence al calor plomizo y se entrega a lo que tenga que pasar: ‘When I grow up’, ‘Only happy when it rains’ y ‘Push it’ (con Shirley por los suelos).
La primera buena noticia del #MadCool2024 es que a Shirley Manson no le ha dado un golpe de calor. A partir de ahí, ya está claro que todo va a salir bien. Garbage nos recuerda que de todo empieza a hacer ya mucho tiempo pero, y qué: aquí seguimos. Push it pic.twitter.com/zhW2FdtkRn
— Mercadeo Pop (@mercadeopop) July 10, 2024
Dua Lipa
Cambio de tercio radical y la primera sorpresa es que todo el mundo estaba ya esperando a Dua Lipa en el escenario principal. Es algo que te encuentras de frente cuando termina Garbage y te das cuenta de la desproporción de expectación. Todo el público está ahí y tiene una pinta bien diferente: mucho más variado en edad y con mucha gente más joven. Con otros colores, otras expectativas y emociones ausentes de nostalgia (pasada, se entiende, otra cosa es la futura). Es una de las estrellas del pop más grandes del momento, y eso es mucho decir en un momento en el que el poderío de Taylor Swift o Karol G tiende a infinito.
Dua Lipa está en su momento y pone a bailar a todo quisqui desde ‘Training season’ hasta ‘Houdini’, con un repertorio que incluye hits de la talla de ‘Don’t start now’, ‘Physical’, ‘Break my heart’ o la más reciente ‘These walls’. Con un cuerpo de baile infatigable y una banda solvente, la artista luce palmito, se contonea y canta que no veas derrochando carisma y dominio escénico. Apuesta por el «optimismo radical» y habla en español para decir que «España tiene muchísima luz y amor». El público se entrega a la causa y a un espectáculo grande en el que no faltan estructuras varias sobre el escenario o cañonazos de confeti. Una fiesta guapa, vaya.
The Smashing Pumpkins en Mad Cool 2024
No es que las expectativas fueran bajas, pero es que no está la banda precisamente en su momento creativo más excelso. Pero atacan el riff metalero de ‘The everlasting gaze’ y ya sabe uno que esta va a ser una noche de las buenas. Van con todo. ‘Doomsday clock’, la versión extendida con solo de batería del hiperbólico Jimmy Chamberlin y ‘Today’ no dejan lugar a dudas. De nuevo el público vuelve a ser el de Garbage, regresamos los de siempre, los de entonces. Suenan potentísimos, rocosos: ‘Tonight, tonight’, ‘Ava Adore’, ‘Disarm’, ‘Bullet with butterfly wings’, ‘Empires’.
Billy Corgan está de buen humor, risueño, jovial, con su túnica negra, su calva y su pinta chunga que te cagas. Pero no da miedo esta noche en la que se lo está pasando en grande, acompañado por James Iha, la versátil nueva guitarrista Kiki Wong, el cumplidor Jack Bates al bajo y Katie Cole doblándole las voces. El redoble final incluye ‘1979’, ‘Jellybelly’, ‘Cherub Rock’ y ‘Zero’, una fiera despedida de energía noventera en vena que rejuvenece a cualquiera. No hay nostalgia porque está pasando, pero un poco sí que vivimos a cubierto en nuestro pasado.
Más conciertos
Después de este arranque, Mad Cool 2024 prosigue este jueves con Pearl Jam como principal reclamo y mucho más. Maneskin, The Killers, Avril Lavigne, Bring me the Horizon o Sum 41 seguirán poniendo el resto de días música a una edición que batalla contra el calor pero que ha tenido una primera jornada a partir de la cual seguir adelante con fuertes mimbres. La buena noticia es que a Shirley Manson no le dio un golpe de calor: un buen comienzo, una buena señal de resistencia. Porque puede que de todo empiece a hacer ya mucho tiempo, pero lo cierto es que aquí seguimos.