Sexy Zebras presenta este jueves en la sala madrileña Joy Eslava su tercer álbum, «primitivo a tope» y titulado muy elocuentemente ‘Somos los putos Sexy Zebras’. «Es un puñetazo de autoafirmación en la mesa. O nos amas o nos odias, pero nosotros siempre salimos al escenario a matar», recalca a Mercadeo Pop el vocalista y bajista Gabi Montes.
«Tocar en la Joy son palabras mayores para nosotros», concede, para después añadir que, en cualquier caso, el grupo siempre va «un poco por delante de lo que mandan los cánones», más que nada porque siempre intentan «optar a lo más grande». «Pero desde que éramos una mierda de grupo hace diez años ya nos íbamos a girar por ahí a palmar pasta», remacha con sorna.
Montes define este tercer disco del grupo como un trabajo «crudo, sin trampa ni cartón», que refleja fielmente la energía de sus incendiarios directos, famosos por ser toda una sesión de rock «sudoroso y frenético». «A la gente la atrapábamos en el directo pero no conseguíamos trasladarlo ni a los vídeos ni a los discos. Queríamos la crudeza y la verdad del directo y estamos muy contentos», señala.
En esta línea, asegura que tanto él como los otros dos integrantes de Sexy Zebras -Jose Luna y Samuel Torío- sudan «en los ensayos igual que en los conciertos», haciendo de esa entrega toda una filosofía de vida: «La clave de la música es esa. Somos así de frenéticos y enérgicos, aunque también nos gusten las melodías. Somos tres tíos que hacemos rock sudoroso y sucio sin trampa ni cartón».
Tras admitir que entre sus referencias hay nombres como AC/DC, The Hives, MC5, Rage Against the Machine o Molotov, Montes afirma que sus canciones son «para el estómago y el corazón», pero desde luego «no para los móviles». «Nuestra música no es para estar en el concierto grabando lo que tocamos. Queremos sinergia con el público», apostilla.
En un país actualmente dominado por el indie, Montes admite que es «sorprendente que una banda de rock sea una rareza», pues cuando vienen artistas extranjeros «la gente alucina y lo llena todo». «A la gente le gusta el rock, pero de repente sale Vetusta Morla, que funciona y nos encanta, y en lugar de comprender que ellos son únicos, la gente les imita. Así todo es igual, pero peor», reflexiona.
Por todo ello, destaca que a Sexy Zebras les gustaría que «hubiera cultura y variedad» para que haya bandas de diversos estilos, para que así el público valorara «lo genuino y no las propuestas que funcionan». «Echamos de menos creatividad y libertad para que la gente haga lo que quiera», remacha.
Por último, Montes avisa de que Sexy Zebras es una banda ambiciosa que quiere ser «grande e intentar cambiar la dinámica para que se expanda la cultura y la gente haga cosas con libertad». «Queremos ser una banda de referencia a nivel latino, en España y en América, y hacernos lo más grande posible», sentencia.
ENTREVISTA PUBLICADA ORIGINALMENTE POR David Gallardo EN EUROPA PRESS.