Arde Bogotá presenta ‘La Torre Picasso‘, el capítulo final de la historia de huida y confrontación que ha sido ‘Cowboys de la A3‘. El último viaje, el que cierra una etapa, la de la superación. Se trata de una historia arriesgada, narrada con los instrumentos, en la que Antonio, Dani, Pepe y Jota presentan la versión más pura y orgánica del sonido rock de la banda. Tocando en el local de ensayo de siempre, movidos por las historias que ocurren fuera de él, esta vez sin límite de tiempo, ni de composición. Ocho señores minutos de rock de la vieja escuela y referencias clásicas (de Héroes del Silencio a Extremoduro).
La Torre Picasso es un rascacielos madrileño, proyectado por el arquitecto estadounidense de origen japonés Minoru Yamasaki. En su momento fue el edificio más alto de Madrid y de España. Pero, ¿y si la Torre Picasso se hubiera convertido en un monumento en conmemoración del estrés, de la vida adulta, de las obligaciones, de la corrupción y del futuro gris? Con Carlos Raya en la producción, La Torre Picasso de Arde Bogotá cuenta a modo de fábula las fases de un duelo, la lucha para destruir ese símbolo y las dudas que deja el vacío que queda después del combate.
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Porque parece evidente que conseguir la demolición de semejante edificio es extremadamente costoso. Organizar a toda la gente necesaria para derribar el monumento, desplazarla desde un extremo de la A3, proveerles del material necesario y llevar a cabo la propia demolición es una tarea titánica. De hecho, cabe plantearse si merece la pena. Si cambiaría algo.
Y es que realmente la importancia de un monumento no reside en el hormigón del que se forma, ni en sus componentes materiales, sino en la memoria del que lo invoca y en el corazón herido de quien lo observa. Quizás el camino más certero fuera construir en el interior de quienes no veíamos el sol por culpa de ese edificio, en lugar de derribarlo. Pero aun así lo derribamos. Y no sacamos demasiadas certezas. Apenas dos: volvimos a ver el sol y volvimos a unirnos.
El vídeo de animación que acompaña la canción es de Aitor Guerrero, director y animador, de la productora Hautsa Gara. Todo un reto para ilustrar la fábula de La Torre Picasso de Arde Bogotá. El caos y la destrucción de lo que ya nos entorpece, nos hace daño y no sirve, con la esperanza de seguir a pesar del dolor, porque lo nuevo está por llegar.