En tiempos pandémicos, con prácticamente todas las salas cerradas desde marzo, cualquier paso al frente es una alegría. Como el que ahora da el Café Berlín de Madrid, que reabre sus puertas ocho meses después cumpliendo con la normativa vigente.
«La amenaza de #elúltimoconcierto se cierne desde hace meses sobre esta sala y todas las del país. Frente a esta dificilísima situación, hemos decidido seguir apostando por una #culturasegura y de calidad. No ignoramos lo complejo de la situación sanitaria, por lo que volvemos a abrir nuestras puertas con aforo reducido – 30% del aforo legal – y todas las medidas de seguridad», plantea el local madrileño, que anuncia ya su programación inmediata:
Noviembre
Vie 27 (20:00 y 22:00) Javier Gutiérrez Massó «Caramelo de Cuba» Trío
Sáb 28 (20:00 y 22:00) De Cerca (Josemi Carmona, Javier Colina y Bandolero)
Diciembre
Vie 4 (20:00 y 22:00) Paco Soto «Flamenco íntimo». Invitada María José Llergo
Sáb 5 (20:00 y 22:00) Farru
Jue 10 (20:00) Taracea
Vie 11 (20:00) Betta & Sanpa
Vie 18 (20:00 y 22:00) Chano Domínguez
+ Jorge Pardo, Antonio Reyes Flamenco, Juanito Makandé & Juan Sebastián Vázquez…
Por su puesto, el Café Berlín vuelve a la actividad adoptando todas las medidas de seguridad y protocolos dictados por las autoridades: «Con la firme intención de velar por la salud y seguridad de todos los asistentes, artistas y trabajadores, desarrollaremos nuestra actividad a un 30% de nuestro aforo, lo que hará que en todo momento os encontréis en un entorno seguro».
Se pondrán a disposición del público entradas que van desde un espectador único hasta mesas de 6 personas manteniendo la distancia de seguridad. Cada zona estará separada por 1,5 metros. Las zonas serán atendidas por camareros que llevarán siempre mascarilla. No habrá barras abiertas para cumplir las medidas de seguridad sanitarias.
Será obligatorio el uso de mascarillas hasta que el personal de la sala asigne la zona que corresponda a cada entrada. Luego el público podrá quitársela para beber durante el concierto.
«En la puerta os tendréis que lavar las manos con nuestros dispensadores de gel hidroalcohólico y pisar nuestra alfombra desinfectante. La renovación del aire de la sala será permanente y utilizaremos medidores de CO2 para controlar que en todo momento el aire se encuentre en condiciones óptimas», explican desde la sala.
