La Sala Apolo de Barcelona retoma este martes su actividad, después del cierre temporal decretado por el Ayuntamiento el pasado 22 de noviembre por deficiencias estructurales. Los conciertos previstos inicialmente en este recinto que fueron reubicados por la lógica incertidumbre se mantienen en sus nuevos emplazamientos, mientras la Apolo recupera la normalidad.
El Ayuntamiento de Barcelona emitió el 22 de noviembre una orden de clausura temporal de la barcelonesa Sala Apolo y locales adyacentes, como su salón recreativo, sala de juego y establecimientos de restauración. La discoteca y demás actividades se desarrollan en unos locales que están sobre un subterráneo de 1.400 metros cuadrados que presentaban «deficiencias estructurales, según una inspección de los Bomberos de Barcelona, técnicos del departamento de Licencias e Inspección del Distrito de Sants-Montjuïc y la Guardia Urbana».