Lugar: Sala El Sol. Madrid
Fecha: 12 noviembre 2014
Asistencia: 300 personas
Artistas Invitados: –
Precio: –
Músicos Kitai: Alexandrevich Mel Jr (voz y guitarra), Fabio Yanes (bajista), Edu Venturo (guitarras) y Deivhook (batería)
Setlist Kitai: Abducción, Shuffle, Nº1, Luz artificial, Aní, Viral, Héroe, Veta, H2O, Superior, Kitai, Chikinouva, Melodrama
Salir a jugarte la vida o no salir
Salir con el machete entre los dientes o no salir. Salir con una motosierra cubierta de pedazos de carne sangrante o no salir. Salir para mutilarte en el escenario o no salir. Salir porque te estás jugando la vida o no salir. Salir como Kitai o no salir.
Esta apuesta a vida o muerte es la que ganaron en la noche de este miércoles los madrileños Kitai en la puesta de largo en la Sala El Sol de su reciente segundo EP, ‘Viral’, que ahonda en la senda de su debut, ‘Origen’, con canciones furiosas, frenéticas, vigorosas y sodomizantes.
Y es que algo tienen Kitai dentro, que les hace salir a un escenario como el de la Sala El Sol con una actitud propia de recintos de mucho mayor aforo. Es actitud, pero no es pose. Es aceptar el desafío doblando la apuesta. Es una necesidad vital que se convierte en conexión inquebrantable con los suyos.
Y es algo que se siente desde que el cuarteto salta a escena como un martillo pilón, comandado por una sección rítmica que asombra por su pegada, un vocalista bolchevique chiflado que ríete tu de Ian Curtis, y un guitarrista que fluye y rasga con violencia. Y no, no hacen prisioneros.
Arrancan con ‘Abducción’ y quienes se enfrentan por primera vez a ellos se miran unos a otros resoplando con sonrisas de estupefacción. ¿Dé donde han salido estos pollos? Bien, no pasa nada, llevan ya tiempo tocando donde haga falta, pero aún estás a tiempo de sumarte. De hecho, ya te has sumado y no lo sabes, te han hecho el puñetero lío, colega.
La sala abarrotada se bambolea con canciones como ‘Luz Artificial’ y ‘Viral’, mientras reflexiono sobre la necesidad de viajar hasta Bilbao o Lisboa para ver a Muse, cuando Kitai les siguen la estela con inusitada solvencia. Igual que a Red Hot Chili Peppers y Rage Against the Machine, dos claras referencias que al confluir con la atrayente personalidad del cuarteto, dan como resultado algo totalmente nuevo.
‘Superior’ es recibida con vehemencia miliciana, mientras se acrecenta el temor a que alguno de los muchachos se haga realmente daño sobre las tablas. Pero la potencia sin control no sirve de nada, algo que Kitai saben de sobra. Precisamente por eso modulan su tormenta sónica para establecer una conexión tan intensa como poco habitual en el underground patrio. Y precisamente por eso salvan vidas.
En el tramo final llegan canciones ‘viejas’ (así de rápido vivimos, lo de ayer es prehistoria) como ‘H2O’ y ‘Melodrama’, recibidas como si estuviéramos en la gira de reunión de Kitai taitantos años después de los días de vino y rosas. Una gira de reunión de las buenas, se entiende, no de las cutres.
¿Pero y entonces qué tienen Kitai? Talento y cojones, caramba. Por eso están en el punto de no retorno. En ese lugar en el que ya no se puede mirar atrás. Por eso la única duda ahora mismo es: ¿les hacemos ya los muñecos de merchandising a los miembros del grupo y nos forramos o esperamos unos días? ¡Colecciónalos todos!
Seguimos!