«La gente quiere bailar. Nosotros tenemos buena salud y aún estamos listos para dejar caer el ritmo funky». Quien así habla es Andrew Love Levy, componente de los Brand New Heavies, combo que puso a medio mundo a bailar allá por los noventa y que todavía hoy, en una segunda juventud, es una máquina más que fiable de, «llámalo como quieras, acid jazz, funkyhouse, dubset…». No en vano, Andrew recuerda: «James Brown intentó robar nuestra sección de vientos».
Este renacimiento de la formación, que en realidad nunca paró de hacer cosas, se cimentó en el concierto que ofrecieron en el legendario Roxy Nightclub de Los Ángeles en 2006, después de casi una década sin haber pisado los escenarios americanos. The Brand New Heavies siguen girando desde entonces con un espectáculo que ha trascendido con mucho lo ocasional de una gira de reunión.
Después de un lustro de continua actividad -«en realidad nunca dejamos de grabar y dar conciertos», apostilla Andrew- y de haber llevado su repertorio de acid jazz a puntos tan dispares como Singapur, Bermudas, Filipinas, Australia o Japón, visitarán Madrid y Barcelona este mes de mayo para ofrecer dos conciertos los días 25 (La Riviera) y 26 (Sala Apolo).
– ¿Qué podremos ver en los conciertos españoles?
Ha pasado mucho tiempo desde que tocamos en 2004 con Nicole Russo a la voz. Esta vez tocaremos muchas de las canciones que la gente recuerda del ‘Brother Sister’ (1994). Lo mejor será que N’Dea Davenport -vocalista en aquel y otros discos- está cantando de nuevo con nosotros.
– ¿Aquella fue vuestra época de más éxito? ¿Qué recuerdos guardas de aquellos años?
No recuerdo mucho más que la diversión que tuvimos colocándonos, emborrachándonos y yendo a bares. Todos escribimos y produjimos el disco entero en seis meses. Supongo que somos buenos multitareas.
– Estáis trabajando en nuevo material, ¿verdad?
Sí, hemos estado probando diferentes sonidos y ritmos, pero no hemos encontrado la dirección adecuada aún. Sin embargo, tendremos un nuevo producto en 2011.
– ¿Qué tal están el funk y el acid jazz en el siglo XXI?
Lo que ocurre con la música es que la gente quiere bailar, llámalo como quieras, acid jazz, funkyhouse, dustep… Es música dance y siempre habrá demanda.
– Is James Brown still in the building?
Él vive en todos nuestros corazones… Tuvimos una oportunidad de darle la mano cuando lo teloneamos en el Wembley Arena. Él nos vio desde un lado del escenario y bailó un poquito. Entonces, intentó robar nuestra sección de vientos. Nos sentimos muy alagados y sentimos que él confirmo nuestro sonido, porque todos nosotros tratamos de copiar su ritmo y sentimiento como banda.
– ¿Son buenos tiempos para ser músico?
Sí, sí, sí!!! Siempre hay mucha música que escuchar y por la que sentirse influenciado. Creo que nunca tendré tiempo para escucharlo todo antes de morir y eso es lo que hace a la música interesante para mí. Me entanca la música clásica y habitualmente acudo a conciertos. No es muy Rock n Roll, pero a quién le importa, ¿no?
– Recomiéndanos alguna nueva banda que estés escuchando tal vez más de la cuenta
Me encanta Jaques Renault.
– ¿Está la industria musical herida de muerte?
De ninguna forma, simplemente está cambiando. A los jóvenes les divierte y les gusta, son solo los mayores quienes no quieren que cambie nunca y que se desarrolle!!!
– ¿Estáis aquí para acompañarnos para siempre?
¡Hasta que muramos! No pararemos.
Pues eso, a bailar el miércoles chicos!!! Allí estaremos!!!